domingo, 27 de marzo de 2011

¿ALGUIEN HA VISTO UN LINDO GATITO?


Al leer ese email quedé unos instantes en blanco, era un breve y cariñoso saludo en el que me dejaba su número de teléfono y su sueño de imaginar que quizás sin saberlo podríamos cruzarnos en alguna calle. Era una buena jugada de Garganta Profunda…dejar su teléfono sin presionar.
La curiosidad fue lo que primero me invadió, igual me daba lata que estuviera aquí y no aprovechar la oportunidad para acercarme un poco más a él, pero sinceramente no era fácil sentirme segura, si después de todo él había manifestado efusivamente su intención de hacerme pedazos a punta de cachas.
Además hay que reconocer que todos los que andamos en estos espacios somos harto pervertidos, unos más otros menos, pero calientes y pervertidos, eso somos TODOS.
¿y… mis reglas? ¿dónde quedaban mis reglas?
Decidí llamarlo, quería hablar con él, eso de todas maneras. No había ningún riesgo en esa llamada, aunque ese extravagante desconocido resultara ser un sicópata peligroso, yo estaría a salvo al otro lado de la línea.
La segunda decisión era que no tiraría con él, eso lo encontraba muy peligroso y el juego me encanta pero en la intimidad se puede llegar a pasar muy mal. Sin ir más lejos yo misma lo he pasado mal cuando algunos machos insisten en satisfacer sus deseos sin respetar los míos. El tema era que entre esas dos decisiones había todo un mundo para recorrer y disfrutar ..si yo quería.
No es ninguna novedad para ustedes que mi mino es muy atinado, que es un caliente pervertido y que me AMA, entonces su postura en este caso era absolutamente fundamental. Su cabeza obviamente iba a funcionar mejor que la mía. Lo llamé y le confesé mis deseos. Sabía que él aunque siempre respeta mis deseos y goza con mis ganas, no me permitiría tomar decisiones en las que pusiera en riesgo mi integridad. Me moría de ganas de conocerlo así es que ideamos un plan en dónde pudiera equilibrar mi seguridad con mis deseos.
Un lugar público era el sitio en dónde yo estaría bien. Era un día sábado y yo tenía un evento en el trabajo. ¿qué mejor lugar que protegida por todo mi círculo? Allí sabía que al mínimo gesto aparecerían una cantidad suficiente de machos dispuestos a agarrarse a combos de ser necesario.
Lo llevaría a mis dominios, dejé una entrada para ese evento con su nombre en la ventanilla, yo tomaría el asiento contiguo, de esa manera yo podría controlar toda la situación por mucho ímpetu que tuviera mi compañero.
Lo llamé, me tiritaba todo, la conversación fue torpe y el tono bastante raro, ambos estábamos claramente nerviosos e intentábamos darle algo de naturalidad a las palabras, cosa que ninguno de los dos conseguía, hice la propuesta y el aceptó mi juego.
¿Y cómo nos encontramos? Preguntó al final
No te preocupes-le dije – yo te encuentro, tú sólo espera.
Yo tendría el control hasta el final, incluso podría arrepentirme de hablarle y sólo mirarlo de lejos.
Partí con la adrenalina a mil, como cabra chica con juguete nuevo, enfundada en unas pantys negras con línea, un top bonito y unos pantalones de satén , la tela favorita de mi amigo, suavemente provocativa no quise vestirme de guerrera ya que no estaba dispuesta a la batalla.
Yo tenía en la cabeza una imagen confusa y amedrentadora de mi amigo. Habíamos hecho cámara y obviamente mi atención estaba fija en una parte de su anatomía que en esta oportunidad estaría muy oculta. Había visto su cara sólo un momento en esa sesión, entonces no sabía que tan difícil podría ser reconocerlo.
Concretamente había demostrado ser un tipo con cojones, valiente, intenso, lascivo y enfermo de caliente, bastante guapo y con una teja algo corrida.
Apenas hice ingreso di una mirada panorámica, no había mucha gente todavía. Esperaba al LOBO FEROZ, por supuesto yo en mi plan de Caperucita me sentía un bocado tentador, pero que ese Lobo no se comería.
Mis ojos se posaron algo incrédula en un desconocido. Un jovencito guapo con cara de niño bueno, con una mochila pequeña al hombro y con una mirada curiosa, más bien de ratón asustado frente al gato. ¿Sería ese era el temido GARGANTA PROFUNDA? El GARGANTA PROFUNDA intenso, caliente, morboso, adicto al sexo, esa máquina de follar que se chorreaba copiosamente una y otra vez sin descanso ante mi mirada atónita. No podía concordar todo eso con la imagen menuda del muchacho que se paseaba solitario… pero no había dudas era él.
Llamé a mi perro y le conté, el Lobo Feroz era un gatito (capaz sea como el Gato con Botas de Shrek, ese tiene doble personalidad), pero como venía de Islas Canarias y me inspiraba la dulzura de Tweety, Piolín, entonces empecé a referirme a él como El Canario (es harto más fácil hablar del Canario que de Garganta Profunda).
Lo miré bastante rato de lejos, me reía sola pensando todo el miedo que me había generado ese come mujeres que ahora se paseaba con una actitud ingenua e inocente frente a mis ojos. El también me miraba bastante, así me di ánimo, me acerqué con una sonrisa en los labios y le dije.
. -Hola soy Trinidad-
Ahí me puse muy nerviosa, muy acelerada por la situación, era la primera vez que hablaba con alguien que conociera mi blog, era el primer pico que salía fuera de la pantalla del computador, el personaje se trasformaba en persona.
Me sentía un tanto en pelotas, más allá de que me hubiera visto idem en videos, en fotos o en cam, mi desnudez pasaba por las palabras escritas en este espacio, por esa forma de volcar en este blog todas mis vivencias sexuales de manera tan franca y sin filtro.
Había reservado dos lugares en la última fila de la Platea, cuando comenzó el espectáculo yo me senté a su lado. Había que permanecer en silencio, a mí ya no me quedaban rastros del temor que me ocasionaba el personaje oscuro. El que estaba a mi lado me causaba mucha simpatía y yo en mis dominios me siento Chica Súper Poderosa, así es que me dispuse a disfrutar de esa instancia.
Ni siquiera lo pensé mucho cuando le ofrecí mi mano, él la tomó y el contacto fue vibrante, la acarició suave y delicadamente, teniendo siempre mucho cuidado de los ojos que nos observaban, respetuoso en extremo. Estuvimos largo rato en ese contacto, piel con piel, contándonos cosas en secreto, no importaba lo que nos decíamos de hecho ni siquiera lo recuerdo , sólo me excitaba sentir su boca cerca de mi cuello y su voz en mi oído, su aire tibio me erizaba los pelos de la nuca, mientras sus dedos recorrían mi brazo.
Salí de la sala antes de que terminara la primera parte, quería llamar a mi perro, contarle que no tenía de qué preocuparse que todo estaba bien, estaba en eso cuando apareció mi jefe pidiéndome una cámara fotográfica. Mi jefe es una persona muy amable, bastante conservador, de hecho muchas veces cariñosamente le decimos “monseñor” y absolutamente obsesivo, yo no tenía más cámara que mi teléfono y no sé como ocuparlo, pero recordé que el Canario es un reportero gráfico y mi experiencia me decía que ellos siempre andan con su cámara a cuestas, así es que apenas pude le pregunté. No me equivoqué andaba con su preciosa cámara en aquella mochila, le presenté a mi jefe y allí la cuestión tuvo un vuelco curioso, se entendieron de mil maravillas, yo encontraba loquísimo verlos conversar a ambos tan gratamente, era divertido yo pensaba si mi Jefe supiera de dónde saqué a este Canario se le cae el pelo que le queda.
Bueno, yo sólo observaba a mi amigo tomando fotos como condenado, arriba de sillas, agachado, yo ya no era el centro de su atención, aunque igual me atrapó en algunas de las tomas, me divertía tanto mirar la escena, o sea, podría haber imaginado todo con Garganta Profunda pero que me ayudara en la pega y de amigo de mi jefe, eso jamás.
Después que terminamos con el trabajo asignado por mi jefe, pasamos a buscar su mochila a la oficina de la administradora, estábamos solos. Tomé su cara, acerqué mi boca a la suya y lo besé sin prisa, degusté su boca, esa que me había tentado tanto cuando la puso en su perfil, sus manos presionaban suavemente mis caderas.
Con ese beso derribaba la muralla que había elevado por el temor.
Nos despedimos ya que él continuaba su viaje por el sur pero con la expectativa de volver a vernos cuando pasara por Santiago antes de regresar a España. Ese encuentro sería distinto, yo estaba en condiciones de llegar hasta dónde mis instintos me llevaran.
En los días siguientes mantuvimos una comunicación bastante fluida, mails con videos incluidos, llamados telefónicos, mensajes de texto, etc. Cuando se acercaba la fecha del regreso yo estaba muy ansiosa, pero… no pasó nada, ni ese día, ni el siguiente. El Canario desapareció sin decir nada más, no digamos que yo estaba enferma de caliente o algo así, pero igual fue un duro golpe a mi ego, ¿qué pasó? ¡Chutas!
Para más remate mi JA se había puesto misterioso y escurridizo. El sábado que se suponía se daban las condiciones para juntarnos, tampoco había dicho nada. ¿se me estarían venciendo las armas de seducción? En una de esas La Mentirosa tenía la razón y mi culo se cayó sin que yo me diera cuenta. Espejito, espejito ¿quien tiene el culo más redondito?
Anduve preocupada… un par de días… pero mi JA hizo su reaparición en gloria y majestad y me deleité con un encuentro en el cual se las jugó poniendo un espejo muy grande a los pies de la cama, mi culo recibió la respuesta esperada y los elogios de costumbre. Su pico incansable se metió por todos mis agujeros prodigando el goce que me hizo sentir nuevamente la perra deseada de siempre.
Su boca recorrió mi geografía sin límites, dándose el tiempo de recorrer mis más recónditas cavernas. Disfruté como enferma de la visión que me entregaba el espejo, sus manos frotando mi zorra, mientras su pico penetraba insistentemente mi culo, hasta el fondo, una y otra vez, sentía como la intensidad iba subiendo y mi cuerpo se transformaba en un volumen compacto de energía ingrávida que voló por la habitación liberada en un grito bestial.
Lo mejor de todo es que antes de despedirnos prometió tenerme un delicioso regalo para nuestro próximo encuentro.

PD. la foto de este posteo la tomó Canario
PD1 del CANARIO nunca más se supo

domingo, 13 de marzo de 2011

LOS OLEAJES DEL CIBERESPACIO



Me pasa que de vez en cuando me fulmina un enamoramiento con alguno o algunos de mis amantes cibernéticos, es algo intenso pero fugaz, me imagino que no debe ser algo tan extraño si después de todo estoy funcionando a flor de piel, con mis sensaciones vivas y con mis hormonas trabajando a full, entonces a veces puede provocar algo que confunde por momentos.
Suspense me enviaba unos emails que me dejaban con el corazón en el cuello, con la zorra mojada y sintiendo que tenerlo cerca haría que explotara el universo, después tuvimos largos y calientes chats que nos dejaban al borde del vértigo, sus comentarios en el blog eran deliciosos, íbamos como avión, él consiguió cámara y …hasta ahí no más llegamos, por alguna razón perdimos el contacto y todo se esfumó sin pena ni gloria.

Otros han tenido una partida más escabrosa, Garganta Profunda, (me referí a él en el posteo EN BÚSQUEDA DEL PLACER DICIEMBRE 2010).

Recuerdo que la primera sensación que tuve con él fue más bien de susto, era demasiado intenso, su nombre era Garganta Profunda y la foto de su perfil era de un transexual. Sus comentarios en blog me gustaban pero siempre sentía que se le pasaba un poquito la mano.
Chateamos algunas veces y en esa instancia me pareció bastante atinado y la única vez que hicimos cámara me gustó mucho, cierto que por mi parte no estaban dadas las condiciones óptimas de privacidad y que él se chorreó más veces de las que yo podría encontrar “normales” por llamarlas de alguna manera, pero recuerdo una sensación muy rica, él me mostró su cara y me gustó muchísimo.
En algún momento de la calentura él mencionó la idea de venir a Chile y de estar conmigo en realidad. Yo le contesté que seguramente sería delicioso, lo que veía en la pantalla me parecía exquisitamente atractivo.
La verdad eso es algo que muchos dicen y cuando viven al otro lado del mundo yo no uso para nada el cerebro y me dejo llevar por la pura calentura. También es verdad que es algo que eventualmente podría gustarme hacer con unos pocos, pero sólo con uno de mis amantes cibernéticos lo hemos hablado con mayor seriedad y siempre como una lejana posibilidad.
Una de mis reglas más importantes en todo esto es:
“no hago citas con gente que conozca por medio del Blog o por chat” me gusta la intensidad en el juego pero a veces es bueno ponerle una gotita de cordura y esas reglas finalmente, me hacen sentir a salvo.
Garganta Profunda empezó a mencionar su venida más de lo que me hubiera gustado, en los comentarios en el blog, en los chats, en sus emails, etc. siempre como una posibilidad y yo cada vez que él hablaba del tema hacía cómo que no escuchaba, no decía nada, aunque tampoco le daba alas para que siguiera alimentando la idea, tampoco le decía que no lo hiciera, porque pensaba que era un simple e inocente volador de luces.
Un día durante mis vacaciones abrí mi correo y apareció un mensaje instantáneo de Garganta Profunda, en dónde me decía que muy probablemente vendría a Argentina y que existía la posibilidad de que pasara por Chile.
Casi me morí del espanto. Para ser franca todo mi discurso de mina liberal y dispuesta a todo por una calentura, se me fue a la cresta en un pestañeo, se me aconcharon los meados como se dice en mi país, no quería ni pensarlo.
No contesté nada de puro susto.
Decidí esperar algún email más formal, en una de esas no pasaba nada.
El email no tardó en llegar, tan intenso como de costumbre asegurando su visita al país vecino y queriendo venir a Chile para ser mío…para saciarnos completamente.
¡AAAAAAAAAHHHHHHHHGGGGGGGG! me quería morir, pensé en no contestar nada nuevamente, simplemente desaparecer del mapa cibernético, pero mi naturaleza me obliga a hacer las cosas de la manera más correcta posible, así es que le contesté con un amable pero tajante email que decía que yo no mezclaba el mundo cibernético con el real. Enarbolaba mi regla de no hacer citas reales con personas que conociera en ese ámbito y responsablemente le decía que no viniera por mí porque no me tendría.
No tuve ninguna respuesta ni ese día, ni el siguiente, pensé que podría haberse enojado mucho con mi postura, pero la libertad en esto de sexo es algo inalienable para mí. Así es que nada, si se enojaba era su problema no el mío.
A la semana recibí otro email, en dónde me decía que ya estaba en Buenos Aires que estaba mal, desilusionado y triste, pero no sólo por mí, que las cosas no le habían resultado como esperaba con otras personas. Que no era malo, ni un ladrón, ni un asesino y que pensaba que podría pasar por mi país, que yo le dijera si me apetecía.
La verdad es que la forma de escribir que tiene sin puntuación y sólo con mayúsculas no permite distinguir tonos, pero me pareció una manipulación total.
Le contesté reiterando mi postura anterior.
-No me gusta que estés triste, pero en ningún caso voy a cargar yo, con la responsabilidad de otras personas que no te hayan correspondido como querías, a cada cual lo que le corresponda. Fui muy clara en el email anterior y no te ocultaré que igual me da pena, pero es una decisión que no cambiaré-
Su respuesta fue más dulce.
BUENO CIELO NO TE APURES.... DE TODOS MODOS IRE A CHILE CREO QUE EL 10 AHORA ESTOY EN BUENOS AIRES... ME HUBIESE GUSTADO SER TUYO COMO IMAGINE Y CREO QUE TU TAMBIEN. BUENO PUES NADA NO PASA NADA. ERAS UN SUEÑO Y SEGUIRAS SIENDOLO. DE TODOS MODOS CUANDO ESTE ALLI TE DEJARE EN UN CORREO EL NUMERO QUE TENGA ALLI... NO SE SI PRIMERO ESTARE EN SANTIAGO O LUEGO DE BAJAR AL SUR PASARE ALGUNOS DIAS ALLI... NO SE ME ESTOY ORGANIZANDO AUN... BESOS.

No puedo negar que eso me dejó mucho más tranquila. No me es posible desligarme fácilmente de las personas, me daba lata lo que estaba pasando, igual me sentía culpable de haberle creado falsas expectativas, pero al estar en la intensidad de la calentura cibernética uno puede decir cosas que siente de verdad en ese minuto pero que no van bien en la realidad, de alguna manera me cuestioné la forma de relacionarme frente a la pantalla del compu.
Esa respuesta me devolvía la seguridad.
Mi mino me preguntó mucho qué era lo que yo quería hacer, la verdad es que este personaje me asustaba mucho, su naturaleza insaciable era algo que yo había corroborado, no eran sólo un cartel de propaganda. Me aterraba su intensidad, pero ese tono más amable en su respuesta me dejaba más tranquila y más feliz.
El día sábado cuando en las costas de mi país se esperaba el efecto del Tsumami de Japón, yo recibí mi maremoto personal.

BESOS!!! DESDE TU CHILE DESDE SANTIAGO..... AYER ME DI TOUR POR TU CIUDAD …

Mi corazón se detuvo al leerlo.