El sábado ya teníamos todo preparado, yo sabía manejar la cámara, sólo faltaba que el Joven Amante confirmara la cita.
Busqué la ropa, mi problema era que tenía que ser sexy, pero no de perra, no quería que pensara que íbamos a hacer una súper producción. Confirmó como a las tres y media, te llamé y dormí un rato, después tomé una ducha, era reconfortante sentir el agua cayendo sobre mi cuerpo, me relajaba, pero me miraba y pensaba que iba verme desde todos los ángulos, quedaría ahí grabada…no era fácil. Me vestí frente a ti, conectados con webcam. Me puse un colaless negro, un sostén de encaje del mismo color y pantys de red de color gris oscuro, un vestido ajustado que es muy sexy, bonito y cómodo.
Me fui a tu casa enferma de nerviosa pero absolutamente decidida.
Estuvimos luchando con la tecnología para tratar de ver las imágenes de nuestro estreno porno, en una TV nueva que compramos exclusivamente para esos fines, pero no lo logramos a tiempo, de verdad me daba mucha pena tener que borrar esas imágenes, pero tú no me diste opción, no querías arriesgarte a que yo me quedara sin espacio en la tarjeta y que por eso fracasara la grabación con el Joven Amante.
Igual tenías razón, nosotros tendríamos muchas otras oportunidades para realizar un cinemascope nuestro, pero ese me había gustado mucho… y era el primero.
Se nos acababa el tiempo así es que lo borraste de un paraguazo y nos fuimos rumbo al Teatro Municipal, fuimos a ver un espectáculo español juntos… una hazaña, me cuesta la vida entusiasmarte con algo, yo creo que estabas como cabro chico con juguete nuevo, súper excitado y que de tan feliz, para retribuir, acepta comerse las espinacas sin chistar.
Mientras estábamos en el teatro me costó mucho sacarme de la cabeza lo que pasaría después, sólo la excelente calidad del espectáculo logró despejarme un rato y fue muy bueno, ya que me bajó el nivel de ansiedad.
Al terminar nos fuimos a tu casa, tú te quedarías allí y yo tomaría mi auto rumbo al departamento del Joven Amante. El camino de vuelta fue nerviosito pero rico. Igual prefiero salir de tu casa, siento que estamos más juntos en estas aventuras, me gusta despedirme sólo por un rato, un par de horas con la certeza de que cuando te vuelva a ver, será a todo trapo, te galoparé caliente y me llevaras hasta la locura.
Hicimos la última prueba con la cámara y partí, estaba con una hora de retraso respecto de lo que habíamos acordado con mi Joven Amante, cuando iba en camino lo llamé, para calmar su ansiedad …y la mía.
Estacioné y te llamé, el corazón me latía a mil por hora, cuando subí las escaleras sentí que me tiritaban las piernas.
Llegué y como siempre nos sentamos a conversar fumándonos un cigarro, él con un trago y yo con Coca- cola, prendí el pito y empecé a mirarlo, mientras me subía el vestido y le mostraba mis piernas envueltas en la red, me pidió que le contara como estaba, la verdad yo estaba más silenciosa que de costumbre, le dije que me estaban dando vueltas algunas cosas en la cabeza, me dijo que pagaría por saber que era lo que estaba maquinando, entonces me armé de todo el valor que podía, saqué la cámara y la puse encima de la mesa con una sonrisa en mi cara, se quedó pa’dentro, después de un silencio en el cual yo contenía la respiración, dijo- Ok… démosle… confío en ti-. Si después de todo había sido una propuesta suya, no era tan fácil echarse para atrás.
Acercó la silla y puso mis piernas sobre las suyas quedando aún uno en cada silla, sólo las piernas estaban enlazadas, chupó mis labios y metió su lengua en mi boca mientras me agarraba las piernas cada vez más cerca de la zorra, cuando sus manos llegaron a ésta ya estaba jugosa y latiendo, me saqué las pantys , el colaless y tomé la cámara, la encendí y encuadré su cara mirando mi zorra abierta por sus manos, se mojó con saliva los dedos y empezó a meterlos en mi zorra, que se iba abriendo deleitándose con el juego propuesto por sus manos tibias y mojadas.
Le pasé la cámara y comenzó a filmar mientras seguía metiéndome un dedo en la zorra, me calentaba como loca pensando en que luego vería esas imágenes a tu lado.
Me fui al sillón completamente desnuda y me siguió con la cámara, abrí mis piernas y me corrí una paja suave, él me miraba a través del lente. Se bajó los pantalones y le agarré el pico duro y empecé a lamerlo, él seguía de pie, enfocando la cámara en su pico, mientras lo metía completamente dentro de mi boca, deslizando la lengua por todos los bordes, ahogándome para contenerlo entero.
Apagó la cámara y se vino directo a chuparme la zorra y el culo, yo estaba de espaldas y me agarró las caderas subiéndolas hasta que no podía más, me molestaba el cuello ya que estaba con la pera hundida en el pecho, mi cuello es algo delicado por lo que resistí poco rato en esa posición, me resultaba demasiado incómoda, aunque quedaba absolutamente servida para su boca.
Paré y aproveché de instalar la cámara en la mesita de centro, la empujé para lograr un poco más de ángulo y enfoqué el sillón en dónde mi Joven Amante estaba sentado en pelotas y agarrándose el pico. Le pedí que se pusiera el condón y fui directamente a ensartarme en su pico duro, pero me pidió que lo esperara y fue al dormitorio a buscar lubricante.
La verdad es que yo en general me lubrico bastante bien, sólo algunas veces, me imagino que por efecto de la ansiedad y el pito me cuesta algo más, pero aunque no fue de esas veces nunca es malo un poco más de lubricación.
Lo esperé acostada en el sofá mirando a la cámara, o sea, mirándote a ti. Abrí mi zorra, sólo para deleitarte. Apareció con su tubito mágico y me untó la chucha, el lubricante se mezcló con mis jugos naturales. Me metió el pico estando yo de costado, él se hincó en el sillón y me empezó a dar duro, yo me abría el culo para darle más cabida al pico en la zorra, me di vuelta y quedé a lo perrito en el suelo, él siguió metiéndose y empujando con todo, sosteniendo su peso en sus piernas, se ayudó apoyando los brazos en el sillón, pero mis rodillas que estaban en el suelo sin protección empezaron a dolerme demasiado.
Decidí ir al dormitorio, a su gran cama. Agarré la camarita con su trípode y la trasladé hasta el dormitorio. El alegó un rato que no había luz y cosas por el estilo, pero a esas alturas Tarantino se había apoderado de mí y estaba tremendamente embalada con la filmación, por lo que no le di ninguna importancia a sus protestas.
La puse sobre la cómoda, me costó mucho enfocar la cama, entre que veo poco sin lentes y el pito, putas que me costó la weaita.
Finalmente la dejé puesta lo mejor que pude y empezamos a darle ahora ya más en serio, la verdad en ese instante me olvidé de la cámara, cero pudor y más bien cuando me acordaba , me calentaba como perra pensando que a ti te encantaría, por fin podrías cumplir tu gran fantasía, verme culiar con otro, tu sueño de voyeur.
Estuvimos dándole con mis piernas sobre sus hombros o bien alrededor de la cintura, al cabo de un rato sentí su mano hurgando mi culo, metiendo un dedo adentro, jugando con esa sensación deliciosa, firme y constante, yo cada vez más caliente sintiéndolo adentro hasta que exploté en un orgasmo exquisito. El se tendió de espaldas y me puse a su lado acariciándole el pico con una mano y corriéndome una paja con la otra, le puse lubricante y nos abocamos calmadamente a la búsqueda del camino angosto, yo me puse de costado dándole la espalda ofreciendo mi culo, arqueando la espalda y fuimos en forma muy cuidadosa abriendo el paso hasta llegar al fondo, sin una gota de dolor, sentía como entraba y salía sin resistencia suave y delicioso.
Me puso boca abajo y nos acomodamos para entrar en la recta final, subí la cola, sentí que él se estaba dando con la mano, para poner el pico a punto. Lo ayudé a entrar y disfruté sentirlo abriéndose paso en mi culo, la perrería total, me encanta gozarlo por todos mis hoyos.
Ahí la cosa agarró un ritmo del demonio, muy rápido y fuerte, yo puse mis manos en mi zorra no me dio tregua, acabé pero él continuó embistiéndome cada vez más rápido y más fuerte, yo sentía su pico completo en mi culo y gritaba como enferma, me retorcía atrapada debajo de él, hasta casi sentirme angustiada, me anunció que se venía y disfruté sentir como acababa en mi culo, cayó sobre mí y lo estrujé con mis glúteos hasta que no pude más.
Nos quedamos tendidos, él sobre mi espalda durante un instante .En ese momento volví a acordarme de la cámara que seguía pestañeando como haciendo un guiño desde su esquina.
Se levantó y me pidió que apagara la cámara, lo hice y quedé exhausta mirando el techo, esperando que volviera, me quería ir pero no tenía una gota de energía para hacerlo, hubiera querido ser como Mi Bella Genio, y con un pestañeo aparecer en tu casa contigo a mi lado, pero soy la simple y humana Trinidad, así es que pensé esperar unos instantes para recuperar el aliento.
Me trajo un cigarro, un vaso de Coca (él me atiende con mucha ternura, igual que tú…el que nunca me atendió fue El Gerente) y se puso a divagar acerca del largo tiempo que llevábamos juntos, lo bien que le hacía estar conmigo….en fin una serie de cosas que sirven única y exclusivamente para subir el ego.
Me dijo que yo tenía el pellejo de una mina de 20 y en eso empezó a hacer cruces con sus dedos en mi pierna, como marcándome, era una weá bien especial, subía por mi muslo con una concentración casi mística, después empezó a tocarme con la yema de los dedos como pulsando cada zona, lentamente, cambiando cada vez el dedo y la zona de pierna que tocaba, sacando música de mi cuerpo, fue un momento súper íntimo, yo sentía que en la medida que iba pulsando esas notas en mis piernas, yo iba cayendo en trance, como presa de un sortilegio . No me di ni cuenta cuando ya estaba embalada de nuevo con su boca en mi chucha, esta vez casi de costado me chupaba el clítoris que se ofrecía magnífico. Pensé en la cámara pero era demasiado violento parar para encenderla, así es que decidí que era mejor sacrificar las imágenes grabadas en pos de la experiencia vívida.
Acabé un par de veces más y se tendió de espalda, después de pajas y chupadas alternadas acabó explotando en mi boca que lo buscó ansiosa cuando me di cuenta que ya se venía. Se demoró harto incluso pensé que no lo iba a lograr, pero nuevamente sentía esa delicia en mi boca.
Me quedé un rato recostada sintiendo su sabor, la calentura de estar contigo me dio el impulso necesario para levantarme, buscar mi ropa y vestirme.
El empezó a urgirse con lo de la película, me dijo que la viera y que la borrara que alguien más podría verla, que no me descuidara, en fin millones de aprensiones, pero cuando le pregunté si él quería verla me dijo ¡¡Por supuesto, obvio!!
Cuando empecé a juntar las cosas para irme, guardé todo con sumo cuidado, cada cosa como si fuera el tesoro más grande del mundo… era el tesoro más grande y yo se lo llevaba a mi amado perro, que me esperaba babeando en su madriguera.
Busqué la ropa, mi problema era que tenía que ser sexy, pero no de perra, no quería que pensara que íbamos a hacer una súper producción. Confirmó como a las tres y media, te llamé y dormí un rato, después tomé una ducha, era reconfortante sentir el agua cayendo sobre mi cuerpo, me relajaba, pero me miraba y pensaba que iba verme desde todos los ángulos, quedaría ahí grabada…no era fácil. Me vestí frente a ti, conectados con webcam. Me puse un colaless negro, un sostén de encaje del mismo color y pantys de red de color gris oscuro, un vestido ajustado que es muy sexy, bonito y cómodo.
Me fui a tu casa enferma de nerviosa pero absolutamente decidida.
Estuvimos luchando con la tecnología para tratar de ver las imágenes de nuestro estreno porno, en una TV nueva que compramos exclusivamente para esos fines, pero no lo logramos a tiempo, de verdad me daba mucha pena tener que borrar esas imágenes, pero tú no me diste opción, no querías arriesgarte a que yo me quedara sin espacio en la tarjeta y que por eso fracasara la grabación con el Joven Amante.
Igual tenías razón, nosotros tendríamos muchas otras oportunidades para realizar un cinemascope nuestro, pero ese me había gustado mucho… y era el primero.
Se nos acababa el tiempo así es que lo borraste de un paraguazo y nos fuimos rumbo al Teatro Municipal, fuimos a ver un espectáculo español juntos… una hazaña, me cuesta la vida entusiasmarte con algo, yo creo que estabas como cabro chico con juguete nuevo, súper excitado y que de tan feliz, para retribuir, acepta comerse las espinacas sin chistar.
Mientras estábamos en el teatro me costó mucho sacarme de la cabeza lo que pasaría después, sólo la excelente calidad del espectáculo logró despejarme un rato y fue muy bueno, ya que me bajó el nivel de ansiedad.
Al terminar nos fuimos a tu casa, tú te quedarías allí y yo tomaría mi auto rumbo al departamento del Joven Amante. El camino de vuelta fue nerviosito pero rico. Igual prefiero salir de tu casa, siento que estamos más juntos en estas aventuras, me gusta despedirme sólo por un rato, un par de horas con la certeza de que cuando te vuelva a ver, será a todo trapo, te galoparé caliente y me llevaras hasta la locura.
Hicimos la última prueba con la cámara y partí, estaba con una hora de retraso respecto de lo que habíamos acordado con mi Joven Amante, cuando iba en camino lo llamé, para calmar su ansiedad …y la mía.
Estacioné y te llamé, el corazón me latía a mil por hora, cuando subí las escaleras sentí que me tiritaban las piernas.
Llegué y como siempre nos sentamos a conversar fumándonos un cigarro, él con un trago y yo con Coca- cola, prendí el pito y empecé a mirarlo, mientras me subía el vestido y le mostraba mis piernas envueltas en la red, me pidió que le contara como estaba, la verdad yo estaba más silenciosa que de costumbre, le dije que me estaban dando vueltas algunas cosas en la cabeza, me dijo que pagaría por saber que era lo que estaba maquinando, entonces me armé de todo el valor que podía, saqué la cámara y la puse encima de la mesa con una sonrisa en mi cara, se quedó pa’dentro, después de un silencio en el cual yo contenía la respiración, dijo- Ok… démosle… confío en ti-. Si después de todo había sido una propuesta suya, no era tan fácil echarse para atrás.
Acercó la silla y puso mis piernas sobre las suyas quedando aún uno en cada silla, sólo las piernas estaban enlazadas, chupó mis labios y metió su lengua en mi boca mientras me agarraba las piernas cada vez más cerca de la zorra, cuando sus manos llegaron a ésta ya estaba jugosa y latiendo, me saqué las pantys , el colaless y tomé la cámara, la encendí y encuadré su cara mirando mi zorra abierta por sus manos, se mojó con saliva los dedos y empezó a meterlos en mi zorra, que se iba abriendo deleitándose con el juego propuesto por sus manos tibias y mojadas.
Le pasé la cámara y comenzó a filmar mientras seguía metiéndome un dedo en la zorra, me calentaba como loca pensando en que luego vería esas imágenes a tu lado.
Me fui al sillón completamente desnuda y me siguió con la cámara, abrí mis piernas y me corrí una paja suave, él me miraba a través del lente. Se bajó los pantalones y le agarré el pico duro y empecé a lamerlo, él seguía de pie, enfocando la cámara en su pico, mientras lo metía completamente dentro de mi boca, deslizando la lengua por todos los bordes, ahogándome para contenerlo entero.
Apagó la cámara y se vino directo a chuparme la zorra y el culo, yo estaba de espaldas y me agarró las caderas subiéndolas hasta que no podía más, me molestaba el cuello ya que estaba con la pera hundida en el pecho, mi cuello es algo delicado por lo que resistí poco rato en esa posición, me resultaba demasiado incómoda, aunque quedaba absolutamente servida para su boca.
Paré y aproveché de instalar la cámara en la mesita de centro, la empujé para lograr un poco más de ángulo y enfoqué el sillón en dónde mi Joven Amante estaba sentado en pelotas y agarrándose el pico. Le pedí que se pusiera el condón y fui directamente a ensartarme en su pico duro, pero me pidió que lo esperara y fue al dormitorio a buscar lubricante.
La verdad es que yo en general me lubrico bastante bien, sólo algunas veces, me imagino que por efecto de la ansiedad y el pito me cuesta algo más, pero aunque no fue de esas veces nunca es malo un poco más de lubricación.
Lo esperé acostada en el sofá mirando a la cámara, o sea, mirándote a ti. Abrí mi zorra, sólo para deleitarte. Apareció con su tubito mágico y me untó la chucha, el lubricante se mezcló con mis jugos naturales. Me metió el pico estando yo de costado, él se hincó en el sillón y me empezó a dar duro, yo me abría el culo para darle más cabida al pico en la zorra, me di vuelta y quedé a lo perrito en el suelo, él siguió metiéndose y empujando con todo, sosteniendo su peso en sus piernas, se ayudó apoyando los brazos en el sillón, pero mis rodillas que estaban en el suelo sin protección empezaron a dolerme demasiado.
Decidí ir al dormitorio, a su gran cama. Agarré la camarita con su trípode y la trasladé hasta el dormitorio. El alegó un rato que no había luz y cosas por el estilo, pero a esas alturas Tarantino se había apoderado de mí y estaba tremendamente embalada con la filmación, por lo que no le di ninguna importancia a sus protestas.
La puse sobre la cómoda, me costó mucho enfocar la cama, entre que veo poco sin lentes y el pito, putas que me costó la weaita.
Finalmente la dejé puesta lo mejor que pude y empezamos a darle ahora ya más en serio, la verdad en ese instante me olvidé de la cámara, cero pudor y más bien cuando me acordaba , me calentaba como perra pensando que a ti te encantaría, por fin podrías cumplir tu gran fantasía, verme culiar con otro, tu sueño de voyeur.
Estuvimos dándole con mis piernas sobre sus hombros o bien alrededor de la cintura, al cabo de un rato sentí su mano hurgando mi culo, metiendo un dedo adentro, jugando con esa sensación deliciosa, firme y constante, yo cada vez más caliente sintiéndolo adentro hasta que exploté en un orgasmo exquisito. El se tendió de espaldas y me puse a su lado acariciándole el pico con una mano y corriéndome una paja con la otra, le puse lubricante y nos abocamos calmadamente a la búsqueda del camino angosto, yo me puse de costado dándole la espalda ofreciendo mi culo, arqueando la espalda y fuimos en forma muy cuidadosa abriendo el paso hasta llegar al fondo, sin una gota de dolor, sentía como entraba y salía sin resistencia suave y delicioso.
Me puso boca abajo y nos acomodamos para entrar en la recta final, subí la cola, sentí que él se estaba dando con la mano, para poner el pico a punto. Lo ayudé a entrar y disfruté sentirlo abriéndose paso en mi culo, la perrería total, me encanta gozarlo por todos mis hoyos.
Ahí la cosa agarró un ritmo del demonio, muy rápido y fuerte, yo puse mis manos en mi zorra no me dio tregua, acabé pero él continuó embistiéndome cada vez más rápido y más fuerte, yo sentía su pico completo en mi culo y gritaba como enferma, me retorcía atrapada debajo de él, hasta casi sentirme angustiada, me anunció que se venía y disfruté sentir como acababa en mi culo, cayó sobre mí y lo estrujé con mis glúteos hasta que no pude más.
Nos quedamos tendidos, él sobre mi espalda durante un instante .En ese momento volví a acordarme de la cámara que seguía pestañeando como haciendo un guiño desde su esquina.
Se levantó y me pidió que apagara la cámara, lo hice y quedé exhausta mirando el techo, esperando que volviera, me quería ir pero no tenía una gota de energía para hacerlo, hubiera querido ser como Mi Bella Genio, y con un pestañeo aparecer en tu casa contigo a mi lado, pero soy la simple y humana Trinidad, así es que pensé esperar unos instantes para recuperar el aliento.
Me trajo un cigarro, un vaso de Coca (él me atiende con mucha ternura, igual que tú…el que nunca me atendió fue El Gerente) y se puso a divagar acerca del largo tiempo que llevábamos juntos, lo bien que le hacía estar conmigo….en fin una serie de cosas que sirven única y exclusivamente para subir el ego.
Me dijo que yo tenía el pellejo de una mina de 20 y en eso empezó a hacer cruces con sus dedos en mi pierna, como marcándome, era una weá bien especial, subía por mi muslo con una concentración casi mística, después empezó a tocarme con la yema de los dedos como pulsando cada zona, lentamente, cambiando cada vez el dedo y la zona de pierna que tocaba, sacando música de mi cuerpo, fue un momento súper íntimo, yo sentía que en la medida que iba pulsando esas notas en mis piernas, yo iba cayendo en trance, como presa de un sortilegio . No me di ni cuenta cuando ya estaba embalada de nuevo con su boca en mi chucha, esta vez casi de costado me chupaba el clítoris que se ofrecía magnífico. Pensé en la cámara pero era demasiado violento parar para encenderla, así es que decidí que era mejor sacrificar las imágenes grabadas en pos de la experiencia vívida.
Acabé un par de veces más y se tendió de espalda, después de pajas y chupadas alternadas acabó explotando en mi boca que lo buscó ansiosa cuando me di cuenta que ya se venía. Se demoró harto incluso pensé que no lo iba a lograr, pero nuevamente sentía esa delicia en mi boca.
Me quedé un rato recostada sintiendo su sabor, la calentura de estar contigo me dio el impulso necesario para levantarme, buscar mi ropa y vestirme.
El empezó a urgirse con lo de la película, me dijo que la viera y que la borrara que alguien más podría verla, que no me descuidara, en fin millones de aprensiones, pero cuando le pregunté si él quería verla me dijo ¡¡Por supuesto, obvio!!
Cuando empecé a juntar las cosas para irme, guardé todo con sumo cuidado, cada cosa como si fuera el tesoro más grande del mundo… era el tesoro más grande y yo se lo llevaba a mi amado perro, que me esperaba babeando en su madriguera.
Cómo me encantaría ver esa peli... Eres preciosa.
ResponderEliminarBsss.
¿Y cuándo vemos tu peli en Youtube?
ResponderEliminarCoyote
jajaja,mis adorados Fogoso y Coyote, si mi peli aparece en alguna parte será en este blog... de ahí podría volar a otras redes.
ResponderEliminarEn todo caso habría que editarla...es un largo trabajo para aquel que no maneja ese tema.
Un beso a ambos
hola trinidad,
ResponderEliminarvengo rebotado de otros logs y he dado con el tuyo.
Me encantan los blogs donde la gente cu4enta sus historias verdaderas sus deseos y vivencias y ademas tal y como los cuentas...
Creo que desde hoy has ganado un nuevo seguidor Madrileño.
No te perderé de vista.
Como hoy he tenido una explosión de nuevos seguidores aprovecho la oportunidad para darles la bienvenida y agradecer su compañía.
ResponderEliminarUn beso para Arturo, Yildiz,Syd, Br3r, Emerzan, Fogoso,Nauj,Mariela,Bellatrixxx,El Duende Urbano, Eva,Eva Magallanes,Isuck y el Coyote.
Un abrazo para todos
No dejo de sentir un poco de orgullo por haber sido el primero en haberme convertido en un seguidor de tus redondeces y de tus gozosas aventuras. Ojalá que sean muchos más y que tu incipiente carrera de actriz porno te lleve a los más altos sitiales del 7° arte.
ResponderEliminarBesos del Coyote
Mi bella dama.. agradezco los orgasmos que produce en mi cada vez que leo sus publicaciones!! Es ud hermosa!!! Agradezco que me haya nombrado!!!
ResponderEliminarQue el año en el año que está por comenzar se multipliquen los placeres y satisfacciones.
ResponderEliminarFeliz 2010