NO HAY PLAZO QUE NO SE CUMPLA ( I )

Las 17:00 horas del jueves 20 de enero, estaba en mi oficina cuando sonó mi celular, miré la pantalla y era mi Joven Amante. Habíamos acordado juntarnos el sábado por lo que me extrañó que me llamara el jueves.
- Aló, Hola bonita ¿cómo estás?-
- Bien, guapo ¿y tú?-
- Bien….adivina-me dice con un tono bastante neutro.
Yo sabía que su mamá estaba de visita en su depa, así es que me imaginé que seguramente había decidido quedarse unos días más y que la llamada tan anticipada sería para cancelar nuestra cita.
- ¿Tu mamá no se va?-
- No perrita, mi mamá ya se fue…
- tenemos candidato-me dice después de una pausa
Me costó unos segundos entender de qué candidato hablaba, pero cuando caí, el mundo me dio vueltas.
Cuando Gallito tiró pa’la cola, mi Joven Amante me dijo que no me preocupara, que tenía en mente otro candidato.
Un primo, el problema era que este pariente residía en La Serena y eso queda a 500 kilómetros de Santiago. No iba a ser nada fácil tejer la red, pero existe el teléfono, internet, en fin hay maneras de comunicarse, así es que pensé que había hablado con él y que seguramente, por lo menos en una primera instancia, habría accedido.
La adrenalina a mil, nuevamente mi fantasía parecía acercarse a la realidad.
- Mi primo está en Santiago…. ¿Qué me dice mi bonita?…-
Ahí se me cayeron los calzones, me senté, sentí que me costaba respirar, pero no dudé ni un momento.
- Démosle-
- ¿cuándo?
- El sábado-
El sábado es mi día por excelencia, me levanto tarde, a veces duermo una siestecita, tengo tiempo para prepararme para mis perrerías.
- Uffff, me muero de nervios…el sábado, démosle- le reiteré.
Le dimos algunas vueltas, el día sábado a mi Joven Amante le tocaba trabajar en los alrededores de Santiago por lo que regresaría bastante tarde, pero la noche del sábado puede llegar a ser muy larga y por último siempre hay un domingo para recuperarse.
Quedamos convencidos que el sábado sería un excelente día. Confirmaría con su primo y me avisaría.
Apenas le corté, agarré el teléfono y llamé a mi perro. Me tiritaba todo, pero me sentía feliz. Era posible que faltaran sólo 2 días para hacer realidad mi ansiada fantasía. Mi mino es maravilloso, me alentó inmediatamente.
_ ¡qué buena mi rica, mi perra va a cumplir su fantasía!-
No había alcanzado a cortar y suena mi celular nuevamente.
- No puede el sábado, ya no está en Santiago el sábado.
- Shuuuuuuuutas … el viernes entonces-
Estaba con el celular en una oreja y teléfono en la otra.
El día no era el ideal, pero me parecía que la ocasión ameritaba algunos sacrificios.
Volvería a llamar para confirmar.
Mi corazón latía a mil, la boca seca, el tiempo se acortaba.
Mi mino había escuchado la conversa, le expresé mis nervios y él me confortó
- Es lógico que tengas nervios mi amor, si es fuerte la cosa-
Fui al baño para mojarme la cara, sentía como me tiritaban las piernas mientras caminaba, tenía ganas de gritar.
Me miré al espejo y me dije ¡vamos que se puede! Estaba en un punto crítico pero no me acobardaría, si soy una perra caliente y valiente.
Cuando volví del baño tenía una llamada perdida de mi amante. Le devolví el llamado inmediatamente.
- Tiene que ser hoy, se va mañana...pero tú no puedes ¿no?
Ahí sí que se me cayó el pelo. Chutas… . Pensé un lote de cosas prácticas rápidamente, si la ropa con la que andaba era la adecuada, ¿con qué ropa interior andaba? En general me visto bastante provocativa, me gusta sentirme hembra, pero los jueves tomo clases de yoga y como debo cambiarme ropa, trato de no escandalizar a mis compañeras, así es me generalmente esos días me pongo alguna tanguita de algodón un poco más grande que mis acostumbrados colaless, pero ese día curiosamente andaba con una de mis prendas habituales: un colaless negro y un sostén del mismo color. Pensaba a mil por hora, era cierto que tenía que trabajar hasta tarde y que al otro día debía levantarme temprano, pero no quería dejar pasar la oportunidad por ningún motivo.
- Entonces que sea hoy, llegaré cerca de las 10- le dije
- Está bien- me dijo- y tranquila que salga lo que salga, ahí vamos viendo.
La verdad fueron palabras mágicas, me tranquilizaron bastante, si resultaba, bien y si no, bien también, por lo menos lo habríamos intentado.
Evidentemente no pude seguir trabajando, imposible concentrarme en nada, me dieron ganas de dejar todo tirado e ir a mi casa para prepararme para mi ansiada noche, escoger la ropa cuidadosamente y darme una ducha, pero no podía, debía por lo menos hacer acto de presencia, estar físicamente aunque mi cabeza estuviera en otra.
Miraba el reloj a cada rato, estaba súper ansiosa, como cabro chico esperando la Pascua. Llena de preguntas ¿y si no me gustaba? ¿y si no le gustaba? Digamos que yo no conocía al primo ni en foto.
Tenía que esperar hasta las 9 y media de la noche, cerca de las 7, me llamó para confirmar que estarían esperándome en su departamento.
Apenas el reloj dio la hora me fui al baño, las toallitas húmedas son bastantes útiles a falta de ducha, si hubiese estado sola con mi Joven Amante, podría haberme dado una ducha, pero encontraba muy heavy llegar al departamento, que estuvieran los dos tomándose un trago y yo llegar a ducharme, no pues, si yo soy una dama …hasta que me transformo en perra.
Partí, los nervios iban aumentando a medida que me acercaba, hablé con mi perro, él siempre sabe como calmarme, pero esta vez no había mucho que hacer, había que superar los nervios con ganas y darle no más.
Le avisé a mi Joven Amante que estaba abajo, apenas me contestó sentí que se abría la puerta de la calle, -mi primo va saliendo- me dijo.
Nos cruzamos en la entrada, yo ni siquiera pude mirarlo mucho. El estaba saliendo y yo venía llegando, la cosa pintaba para mal.
Pensé que hasta ahí no más habíamos llegado. Quedé marcando ocupado un rato, pensé -porqué no me avisó apenas supo que se iba. Mientras subía las escaleras en mi cabeza volaban las hipótesis de lo que había ocurrido, pero ninguna de ellas correspondía a la realidad.
Cuando llegué arriba me di cuenta que todo seguía en pie, mi JA me dijo que su primo había salido a buscar su celular, que regresaría rápidamente.
Fue bueno estar un rato solos, me preguntó una vez más si seguíamos adelante y yo ni dudarlo.
Para ser franca me había imaginado al Primo distinto, era algo mayor de lo que yo esperaba, pero eso no es tema para mí. Un tipo bastante alto, macizo, muy compuesto, seguro que si lo veo en la calle no me atrae para nada, pero yo me caliento con mi Joven Amante, su primo para mí era algo así como un Bruce más completo, así es que todo bien.
Aproveché para buscar mi pitito y prenderlo, fumé muy ansiosa quería estar algo embalada cuando llegara pero se demoró poquísimo en volver.
Me lo presentó pero les juro que no se bien ni que dije, ni qué hice, nos sentamos los tres en el living, mi joven amante y yo en un sillón y su primo en el del frente, yo lo miraba de cuando en cuando, intentaba coquetear pero las cosas no fluían como siempre, conversábamos pero era claro que a nadie le interesaba, las palabras parecían estar como en mute, los 3 sonreíamos mucho, pero nadie se atrevía a dar el primer paso.
Podríamos haber pasado toda la noche así, así es que yo me junté todas mis ganas y tomé posesión de mi papel de perra, le puse la mano en la pierna a mi Joven Amante y empecé a acariciarla suavemente, piola, él inmediatamente me correspondió con lo mismo, llegaba hasta el borde de la pierna pero sin llegar a tocar su paquete, tampoco quería ir tan rápido como para asustar al candidato.
El se levantó del sillón y se fue al baño, mientras nosotros empezamos a besarnos y agarrarnos con más confianza, cuando el primo volvió a su sillón , ya estábamos en pleno atraque y con su llegada sólo intensificamos las caricias, me gustaba que nos estuviera mirando.
JA empezó a tirarme el colaless mostrándolo sobre el borde del pantalón que traía puesto, lo sentía que miraba a su primo como ofreciéndole un regalo preciado, me paré y me bajé el pantalón dándoles la espalda a ambos, sentir las exclamaciones por partida doble fueron deliciosas.
Ya habíamos partido, aunque no había contacto todavía ya estábamos en la ruta.
Me incliné sobre mi JA besándolo mientras mi culo se ofrecía al candidato, lo sentí acercarse y mi piel se erizó, aún tenía la polera puesta, mi JA me estrujaba las tetas sobre la ropa, otras manos se metían en mi zorra haciendo a un lado el colaless, estaba mojada esas manos desconocidas me hicieron retorcerme de gusto, me penetraba con los dedos, mi sueño se iba cumpliendo paso a paso.
Me di vuelta y el candidato se sentó, me incliné sobre él y mi boca buscó su boca suavemente, su lengua tibia me hizo salivar, chupé su boca conociendo de a poco cada rincón, su mirada nublada me devoraba aun mas que su boca, mi JA pasaba su lengua por otros labios y penetraba mis agujeros sin tregua. Me sentía una verdadera diosa del sexo, una hembra vibrando de placer, capaz de todo, los nervios del comienzo se habían transformado en ganas, unas ganas delirantes.
Me saqué la polera y él desabrochó mi sostén, me encantó presentarle mis pequeñas a este desconocido, me gustó ver su sonrisa espontánea y el brillo de sus ojos al abrir el regalo. Las acarició suaves, pellizcó mis pezones y metió mis tetas en su boca, me calenté tanto mirando esa boca nueva mamando mis tetitas y mordisqueando mis pezones. Me agaché y busqué su pico, apareció espléndido, mi lengua lo recorrió y lo metí entero en mi boca, mi JA vino por lo suyo y los mamé alternadamente, un pico en cada mano, mientras me comía uno le corría una paja al otro, hasta que los junté los dos en mi boca. UFFFFFFFFFFF que delicia tener esas cabezas gorditas llenando mi boca, chocando entre sí, nunca pensé que me gustaría tanto.
JA, era el anfitrión, él llevaba la batuta, propuso irnos a la cama y aceptamos gustosos, a esas alturas aceptaba gustosa todo lo que me propusieran.
Me puse en cuatro patas mamando al primo mientras JA me arrancaba chillidos mamando mi clítoris.
Me acosté de espaldas y JA repartió condones y lubricante, no quedaba mucho, me preocupé un poquito, pero estaba bien lubricada con tantas chupadas.
Primo partió conmigo patitas al hombro, JA feliz observaba como me penetraba con fuerza, gozando como un voyeur profesional, que no quiere perder detalle, se acercó y metió su pico en mi boca mientras el primo seguía dándome con fuerza. Rico, me ahogaba con el pico atravesado mientras el pico nuevo me frotaba constante, rápido y fuerte, sus manos estrujaban mis tetas, acabé deliciosamente.
Primo le dio el paso a mi JA, preguntó por dónde, -le dije -por donde quieras, pídelo- me dijo- dame por el culo, métete hasta el fondo, apretadito- le respondí gozando e imaginando su pico surcando mi culo.
Yo seguí de espalda mientras se abría paso muy lento por mi ano, el dolor de la primera apertura, como la mayoría de las veces, pasó muy rápido y el placer inundó mis sentidos, sentirlo frotando, estrecho y con mi zorra disponible mojada e hinchada era arrebatador.
Primo había abandonado la habitación. JA me puso en cuatro patas y empezó a darme por el culo en esa posición, lo llamó para que nos acompañara, él se demoró pero finalmente llegó, sentí mi gruñido gutural y el temblor contenido hasta explotar en mi centro. Me calentaba tanto exhibirme culiando como perra, mi JA acabó derramando su leche caliente sobre mi boca, su beso final fue como un chocolate después de una gran cena.

...YA ME SENTÍA UNA INICIADA